EN DEFENSA DE LA FE DE NUESTROS HIJOS (Mama Bears Apologetics) Enseñando a sus hijos a desafiar las mentiras de la cultura Es una mirada incisiva e ingeniosa a las ideas falsas en las que se están ahogando los niños hoy en día, a menudo bajo los ojos de madres cristianas bien intencionadas pero inconscientes de lo que están recibiendo sus hijos en las escuelas, colegios, universidades, medios masivos de comunicación y en su entorno laboral y social. Me encanta que vaya directo al meollo del problema en cada capítulo: la información suficiente para proporcionar un contexto útil y puntos clave de comprensión, pero no tanto como para que nos sintamos abrumados. Si cada madre cristiana leyera y aplicara cuidadosamente este libro en la crianza de sus hijos, transformaría profundamente a la próxima generación. Los padres son como gerentes, excepto que no solo tratan con gente, sino que la crean. Como padres tenemos el honor de entrenar, moldear y educar a nuestros hijos desde que nacen hasta que (si todo va bien) llegan a ser miembros funcionales de la sociedad. William Ross Wallace describe correctamente la maternidad en su poema del siglo diecinueve, titulado: “La mano que mece la cuna es la que gobierna el mundo”. En otras palabras, si los hijos son nuestro futuro, las mamás (y los papás) están en la posición de ayudar a determinar cómo será ese futuro.

En Defensa De La Fe De Nuestros Hijos Enseñando a sus hijos a desafiar las mentiras de la cultura

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EN DEFENSA DE LA FE DE NUESTROS HIJOS (Mama Bears Apologetics) Enseñando a sus hijos a desafiar las mentiras de la cultura Es una mirada incisiva e ingeniosa a las ideas falsas en las que se están ahogando los niños hoy en día, a menudo bajo los ojos de madres cristianas bien intencionadas pero inconscientes de lo que están recibiendo sus hijos en las escuelas, colegios, universidades, medios masivos de comunicación y en su entorno laboral y social. Me encanta que vaya directo al meollo del problema en cada capítulo: la información suficiente para proporcionar un contexto útil y puntos clave de comprensión, pero no tanto como para que nos sintamos abrumados. Si cada madre cristiana leyera y aplicara cuidadosamente este libro en la crianza de sus hijos, transformaría profundamente a la próxima generación. Los padres son como gerentes, excepto que no solo tratan con gente, sino que la crean. Como padres tenemos el honor de entrenar, moldear y educar a nuestros hijos desde que nacen hasta que (si todo va bien) llegan a ser miembros funcionales de la sociedad. William Ross Wallace describe correctamente la maternidad en su poema del siglo diecinueve, titulado: “La mano que mece la cuna es la que gobierna el mundo”. En otras palabras, si los hijos son nuestro futuro, las mamás (y los papás) están en la posición de ayudar a determinar cómo será ese futuro.